sábado, 1 de diciembre de 2012

Comentario de manga semanal XVIII

Esta sección contiene detalles de la trama de las series mencionadas

No, no es una ilusión provocada por efluvios pre-navideños, ni tampoco es un milagro provocado por un ser superior. Simplemente esta semana hice por no apurar a tope para no acabar el domingo por la tarde redactando el artículo a toda prisa. Quise romper la tradición que se había venido estas últimas semanas y anticiparme un poco para hacerlo con calma. Además, así una vez termine la redacción del artículo podré aprovechar la semana de vacaciones que tengo por delante para ver un anime y preparar  la próxima reseña, siguiendo el ritmo autoimpuesto de hacer una reseña cada 3 comentarios de manga semanal (que realmente me fijé en el patrón cuando ya llevaba los tres primeros artículos, pero ya que lo vi, haré por mantener el paso)

He tenido que realizar numerosos sacrificios para llegar a este momento, aplacando las ganas de jugar al assassin's creed 3, que tengo bastante abandonado desde que no pude resistirme a catar el online del Black Ops 2 (y eso que hay veces que no mato a los enemigos ni vaciándoles un cargador en la puta cara, lo cual hace que me encabrone y deje de tener ganas de jugar, que si no...). Hoy también he empezado con mi segundo año en la NBA de manos del NBA2K13, con suerte dispar (perdí un partido y gané otro) pero con un promedio de 33 puntos muy rico (y todo a triplazos, obviamente). Pero bueno, ahora vamos a dar paso a la sección, que al final me dan las tantas y publico el domingo xD


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Interesante como pinta el desarrollo de esta saga de One Piece, aunque no sabría decir si estamos ante lo que parece un final inminente (de tan inminente incluso podría decirse más bien que es un final prácticamente consumado ya). Empezamos donde lo dejamos la semana pasada, con Caesar intentando convencer a Luffy de que está protegido por gente muy poderosa y que no dejarán que le apalicen impunemente, pero eso no afecta al capitán de los mugiwara, que se muestra totalmente superior en combate, evitando los traicioneros envites de su enemigo e ignorando sus palabras sobre la que se les viene encima si le derrotan.

Pero no te cortes hombre...
Después de un breve recorrido por el resto de grupos, con algunas excepciones (no sabemos el paradero de Franky ni qué se supone que está haciendo Chopper desde que se llevó a Mocha con el empacho de caramelos con droga), veremos que todo se va desarrollando según el plan de Clown... ¿o no? Pues no exactamente, ya que Kinemon ha hilado los cabos y piensa que el dragón que derrotaron era su hijo Mononosuke y emprende el camino de regreso mientras que Brook hace lo posible por frenarle, ya que el gas venenoso de Caesar debe estar avanzando tras ellos. Usopp, que continuó con la búsqueda de unas esposas de kairouseki, acabó llegando de alguna manera a la sala de control en la que se encontraba Clown con sus hombres antes de decidir bajar a  ocuparse de Brownbeard. Por otro lado, los niños, ya libres del mono (qué fácil...) avanzan con los marines y el grupo de Nami; y Zoro y Tashigi avanzan hacia el punto esperado... o eso creo, que con Zoro nunca se sabe.

Y una vez acabados los aperitivos, vamos al punto fuerte de esta semana, que ha estado en el enfrentamiento entre Smoker y Law contra Vergo. Pese a que en un principio parecía que Smoker no estaba siendo capaz de hacer frente a Vergo, y que incluso sus poderes de la Moku Moku no Mi se estaban volviendo en su contra ante el control del Haki de su rival, finalmente se revelaron las verdaderas intenciones del Cazador Blanco... y es que no trataba de derrotar a su enemigo, sino de arrebatarle el corazón del shichibukai para así dejar de estar en deuda con él, cosa que resultaba terriblemente vergonzosa para el marine.

Una vez que hubo recuperado su corazón, Law pasó a la ofensiva, permitiéndose incluso lanzarle un desafío a Doflamingo, que estaba escuchando la escena a través de un den-den mushi que llevaba Vergo, previniéndole de que iba perder a su mejor subordinado, Vergo, y al propio Caesar Clown. Culpará a su arrogancia y a su exceso de confianza el no haber sido capaz de prever que algo así iba a ocurrir, y le advertirá de que no podrá mantener su posición para siempre. Law derrotará a Vergo de un sólo corte, que de hecho parece haber cortado la isla entera a esa altura, pese a que Doflamingo revelara que en el pasado el haki de Vergo fuera capaz de bloquear el poder de corte de Trafalgar. Este mismo dirá que los marines llevan tramando algo desde la batalla de Marineford, ya que han evitado provocar incidentes serios con los principales piratas, y que la nueva era acababa de arrancar y nadie podría detenerla ya.


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Retomamos la acción con el ninja más gamberro del medio levante de Konoha donde la dejamos la semana pasada. La estratagema que emplearon para facilitar un ataque desde arriba contra el Juubi, Madara y Obito resultó siendo inefectiva, ya que el inmenso poder de la bestia de diez colas le permitió repeler sin esfuerzo alguno la Bijudama lanzada por el Hachibi. Además de esto, desde su posición quedaron expuestos ante el enemigo, resultando herido el hachibi y desapareciendo uno de los clones de Naruto, que empleó para proteger a Kakashi del ataque lanzado por el Juubi.

Ahora somos más, ¡¡palizaaaa!!
Después del fracaso de la ofensiva todo el grupo procedió a replegarse para seguir plantando cara, pero al parecer las fuerzas del hachibi y del kyuubi habían llegado a su límite, por lo que se retiraron para recuperar su chakra, privando a Bee y Naruto de sus formas más poderosas en un momento crítico. Obito seguirá insistiendo con su idea de que da igual quien sea, todos en el mundo ninja acabarán convertidos en algo como él, pese a que cuando Naruto actúa para proteger a Kakashi se perciben ciertas dudas en Obito, que piensa que Naruto le recuerda a él cuando era joven. Este le responderá que él no piensa convertirse en algo así, sino que se convertirá en el Hokage, a lo que Obito le comentará que con el Tsukiyomi infinito podrá convertirse en lo que quiera y ordenará al Juubi que lance una bijudama contra ellos.

Cuando parecía que el destino de Naruto, Bee, Kakashi y Gai estaba decidido, el ataque del Juubi pasará a su lado sin alcanzarles. Después de unos instantes de sorpresa y confusión, veremos aparecer a Hinata e Ino, revelando que han podido desviar el ataque con un Shintenshin no Jutsu, y posteriormente irán llegando el resto de integrantes del ejército aliado, a excepción de los kages obviamente, lo que deja a Shikamaru como comandante formal del Cuarto Escuadrón. Todos formarán frente al Juubi, demostrando que están dispuestos a no rendirse tan fácilmente. Al frente de todos ellos, Naruto afirmará que posee una técnica que podrá vencer incluso al Tsukiyomi inifinito que planean ejecutar, el Fuuton Kazekiri no Jutsu. ¿Podrá derrotar a los Uchiha renegados con esta técnica?


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... y como no podría ser de otro modo, el que estaba detrás del mensaje desde Hueco Mundo es Urahara. El mensaje es trasmitido desde el propio Kon, ya que al parecer se lo había implantado antes de que se fueran allí en previsión de que pudiera ser útil, lo cual despierta el interés de Mayuri, que ordena a sus hombres que lo atrapen para examinarlo detenidamente. Una vez atrapado, retomaremos el mensaje de Urahara, en el que le informa a Ichigo que tanto él como Inoue y Chad están bien y que no se preocupe por ellos, que haga lo que tenga que hacer. Hay un momento en el que alguien intenta entrar al oír la voz de Ichigo, pero Inoue y Chad no le dejan; Urahara le dirá que no se preocupe porque han hecho un trato y no es ninguna amenaza para ellos. Por el comportamiento (y porque no quedan muchas posibilidades), diría que era Grimmjow, ya lo veremos supongo.

Y esto es el palacio... un sitio con falos everywhere...
Una vez tranquilizado en ese punto, Ichigo le preguntará al barbacas si serán capaces de arreglar su espada en el Palacio del Rey de las Almas. Este le contestará que no, que no es posible arreglarla, pero que sí que es posible volver a forjarla de modo que quede una zanpakutoh bastante similar a la original. Esto parece bastar a Ichigo, que acepta acompañarles al Palacio junto con Byakuya, Renji y Rukia (que por cierto, a Zaraki no se lo llevan... eso es discriminación, o más bien que Zaraki ya estará por ahí entrenando para partirle el culo al que le derrotó, que le pegaría bastante de hecho). Así pues, con todo decidido van a hacer los preparativos para el viaje de vuelta, pero no es posible hacerlo desde el transporte que empleó la División Cero para descender al seireitei, por lo que acaban en casa de Shiba Kuukaku, lo cual no le hace demasiada gracia a Ichigo, que no debe guardar buenos recuerdos de su último viaje en Kuukaku Airlines. 

Una vez son lanzados camino al Palacio Real veremos aparecer a Ganju, que le pregunta a Kuukaku si cree que ha sido buena idea mandarle allí, a lo que responderá que era necesario aunque el "tío" se entristezca por ello. Después ordenará a Ganju que siga entrenando, que deberán tomar parte en la próxima batalla, revelando que vino acompañado por varios de los fullbringer (vemos a Tsukishima, Ganjou y Giriko (el mayordomo del reloj). Parece mentira que cuando las cosas pinten bien, Tite Kubo se empeñe en sacar a la luz momentos que todos preferiríamos olvidar. Como dijo John Smith, al final veremos aparecer a los bounds (primera saga de relleno del anime de Bleach). 


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Y si la semana pasada veníamos con un capítulo típico de inicio de combates, esta semana venimos con el cierre de estos combates, lo cual nos deja la impresión de que sólo ha sido un pequeño aperitivo para la que se avecina, porque si no, no entiendo nada... pero claro, esto es Fairy Tail, donde no rigen las normas de coherencia a las que estamos acostumbrados, y ojo que no creo que sea malo eh. Es más, me encanta el carácter generalmente desenfadado que tiene Fairy Tail, lo que no significa que no tenga sus momentos serios y que los disfrute igualmente.

¡¡Zas, en toda la boca!!
En cuanto a los combates empezamos con el que dejamos la semana pasada, a cargo de Lucy y Yukino que ya han recuperado sus llaves gracias a la intervención de Loki. Será Yukino quien tome la iniciativa, utilizando a Piscis para el ataque y a Libra para compensar el manejo de la gravedad que tiene su oponente. Este intentará librarse de Piscis invocando un remolino de agua, pero sólo consigue dar pista a Lucy para que invoque a Acuario. Lilly recordará todo el entrenamiento que realizó con Gazille y todas las veces que resultó herido para cortar a través del ácido de su enemigo, que queda sorprendido. Wendy es capaz de ignorar el somnífero letal de su rival gracias a su magia de apoyo, pero como ella misma dice, cuando es necesario combatir por sus amigos es capaz de convertirse en un dragón. 

En el resto de combate, Mirajane que estaba siendo sometida por el veneno de su rival agradecerá el hecho de que hayan sido separados del resto, ya que así podrá desatar toda su fuerza sin temor. Liberará su forma demoniaca para absorber el veneno y lanzará un contraataque contra su rival. por su parte, el rival de Natsu no puede hacer nada ante las acometidas del dragon slayer, que lo arrincona enseguida sin tener que utilizar siquiera sus técnicas de fuego. El capitán le prevendrá que oponerse a ellos es oponerse al Reino, que se lo piense dos veces, pero Natsu le replica que deberían haber sido ellos quienes se pensasen dos veces meterse con Fairy Tail antes de darle el golpe de gracia. Terminados los combates, todos salen al mismo pasillo, reuniéndose de nuevo.



Y con esto damos por concluida la entrega semanal de esta sección. Dieciocho semanas consecutivas... la verdad que cuando empecé esta sección en junio por puro aburrimiento no me esperaba darle una continuidad. Asumí que en algún momento acabaría por sucumbir ante la pereza, o simplemente alguna semana no podría por causas de fuerza mayor y ya perdería las ganas y el empuje, pero lo cierto es que no ha sido así para nada. La pereza está ahí y no hay que descartarla nunca, pero con más o menos ganas dependiendo de la semana, sobre todo por asuntos de trabajo, he seguido cumpliendo plazos. Ahora a ver si llego a hacer la reseña de la serie antes del próximo comentario de manga semanal y ya la leche.

Por lo que respecta al comentario, esta semana la que brilla por encima de las demás ha sido sin duda One Piece. Parece que el final de esta saga está medianamente cerca, si es que no podemos decir que casi ha terminado ya, con la derrota de Vergo y Clown. Siempre pasa algo para hilar sagas, así que a ver qué es lo que traman exactamente Law y Luffy (o bueno, Law... porque a Luffy no le veo ideando grandes planes preparados la verdad) y a donde les llevan sus pasos.

Naruto es otra de las que parece que se encamina al último asalto de la saga, porque habiendo llegado todo el ejército aliado ya no hay mucho más que rascar en otros lados. No sé si será inmediato o no, o si habrá más influencias (queda por aparecer Sasucristo y ver qué pasa con los Kages medio moribundos), pero lo cierto es que parece que las cartas ya están sobre la mesa. En Bleach como ya dije arriba, la cosa es que cuando parece que la cosa pinta bien e interesante acaban metiendo personajes que muchos preferiríamos que se olvidasen y punto. Lo de los fullbringer ha sido una cortada de rollo descomunal que hace que ni conocer qué es realmente Ichigo, o quien era su madre, o si es verdad que es medio quincy interese. Y Fairy Tail... un poco decepción. No esperaba que estos combates fueran el plato fuerte, pero tampoco que fueran una mera comparsa. Ahora a ver por donde vamos la semana que viene, si volvemos a los juegos o seguimos con el grupo de palacio.

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