Introducción
Bueno, pues aquí estamos de vuelta después de un periodo
bastante largo de inactividad. Y es que ya sabéis lo que dice el refrán: buen
fucker nunca muere (?). La cosa es que ya lo avisaba en su momento, que el
trabajo en el blog estaba empezando a ser más una carga que una satisfacción y
eso es algo que no puedo permitirme en las actividades en las que invierto mi
tiempo libre. Al final eso se materializó en el abandono total del blog, cosa
que nadie habrá echado de menos, hasta el día de hoy. Año y medio después,
tenemos nuevo artículo.
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¿Por qué ha tenido que volver a escribir...? |
Y como bien dicen, ya ha pasado agua bajo el puente desde
ese comentario de manga semanal LXIII. Mi vida ha tenido algunos cambios y he
pasado por situaciones buenas y otras que no lo han sido tanto. Al final
terminé viajando a Japón en el verano de 2014 y pude disfrutar de todas las
tiendas frikis que hay allí y de visitar algunos de los parajes más bonitos del
país. También aproveché para comprar algunas de esas cosillas que probablemente
ni mire nunca pero que hace ilusión tenerlas, como unas novelas de High School
DxD (novelas que ya había traducido al castellano desde sus traducciones
inglesas) o la Weekly Shounen Jump de una de las semanas que estuve allí (la
que tiene el penúltimo capítulo de Kuroko no Basket, si no me equivoco)
He visto varios animes desde que abandoné la actividad
del blog, pero de momento he querido volver con la última que he visto y ya
veré qué hago con las que vi en ese lapso de tiempo. Probablemente algunas aparecerán en la sección y otras no. Y es que,
como era obvio, al final no cumplí del todo mi amenaza de alejarme del mundo
del manganime, aunque he de reconocer que sí que he tenido rachas de no
dedicarle mucho tiempo. Pero al final sí que he ido leyendo semanalmente las
series que trataba en mis comentarios de manga e incluso he ojeado algunos
primeros tomos de series que, eventualmente, terminaré leyendo. De hecho, ahora
que menciono esos mangas, ¡ha pasado tanto tiempo desde mi último artículo que
hasta ha acabado Naruto! Yo pensaba que no viviría para ver su final. Ahora
sólo queda esperar al fin de One Piece y ya podré decir que lo tengo todo
hecho.
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¿Artículo nuevo a estas alturas de la vida? |
Bromas aparte, ya que siempre surgirán nuevas series que
nos llamarán la atención, lo cierto es que últimamente noto que hay series
buenas pero ya no salen “Gigantes” como lo fue Naruto en su momento o lo sigue
siendo One Piece aún hoy en día. Bleach se deshinchó de una manera
espectacular, dejando patente la falta de ideas de Kubo sobre cómo salir de su
propia obra. Y las obras de Mashima carecen de la contundencia suficiente como
para reclamar un puesto mayor, por más que Fairy Tail me guste mucho, incluso
considerando su inconsistencia en muchos tramos. Por estas cosas (y porque fue en
gran parte el culpable de que terminase cansándome del blog), no creo que haya
mucho espacio para el manga en el blog en esta segunda etapa. Aunque luego las
cosas salen como salen, por lo que tampoco se puede confirmar nada al 100%. Sea
como fuere, lo que me trae aquí hoy es el anime y no el manga, así que vamos a
empezar a comentar la serie de una vez.
Información
Ansatsu Kyoushitsu, cuya traducción sería “Aula de
asesinato”, es un manga creado por Yusei Matsui que se publica desde julio de
2012 en la Weekly Shounen Jump. Actualmente cuenta con 15 tomos publicados y
más que vendrán, ya que la serie sigue publicándose semanalmente en las páginas
de la revista de Shueisha. El anime cuenta con 22 episodios y un especial que
se denomina “episodio 0” que cuenta una historia de veracidad bastante poco
fiable, basada en el aspecto cómico de la serie. El anime cubre aproximadamente
los primeros 7 tomos del manga, por lo que es de esperar que en algún momento
se realice una segunda temporada de la serie que continúe con la historia. La
animación de la serie corrió a cargo del estudio Lerche, fundado en 2011 como
una filial del Estudio Hibari.
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Seguro que no está tan mal. Dadle una oportunidad |
Por lo que respecta a la historia, la serie nos sitúa en el
instituto Kunugigaoka y, en concreto, en una de sus clases, la “3-E”. Y es que
el director de la institución, Asano Gakushou, ha establecido un método para
potenciar los resultados de sus alumnos y presionarles para estudiar más y más.
Ese método consiste en enviar a los alumnos con las peores notas a la clase
3-E, la clase del “End”, para que sean humillados por todos. El miedo a ser
enviado a esa clase, que no puede disponer de las excelentes instalaciones del
instituto y que, de hecho, está situada en una vieja construcción en la zona
montañosa que hay detrás del campus del instituto, fomenta el interés del alumnado en mantener sus
notas lo más altas posibles. Ese tipo de incentivo hace que incluso un instituto
creado hace poco tiempo como el Kununigaoka sea capaz de establecerse en los
primeros puestos de los rankings de los mejores institutos del país. Sin embargo, la vida de estos estudiantes
abocados al fracaso cambia cuando hace aparición su nuevo profesor.
Esto parecería la típica historia de cómo un profesor
logra motivar a unos alumnos por los que nadie daba un duro. Y de hecho, esa es
la premisa de la serie, pero con la peculiaridad de que su nuevo profesor fue
presentado por miembros del ministerio de defensa de Japón, ya que es una
especie de pulpo humanoide amarillo capaz de desplazarse a una velocidad máxima
de Mach 20 (veinte veces la velocidad del sonido)y el culpable de haber
destruido el 70% de la superficie de la Luna. Junto con el anuncio de que iba a
convertirse en su nuevo profesor, también les comunican que deben matarle antes
de un año o éste destruirá la Tierra y la recompensa por conseguirlo: 10.000
millones de yenes (unos 74 millones de euros al cambio actual)
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Espero que merezca la pena despertarme de la siesta
para esto... |
Con la condición de que el profesor no huirá ni se
esconderá en ese plazo y de que no hará daño jamás a ninguno de sus alumnos,
los jóvenes de la clase comienzan a entrenar usando unas armas especiales que
son capaces de dañar a su nuevo profesor, al que bautizan como Korosensei (juego
de palabras entre “korosenai”, inmortal, y “Sensei”, profesor), bajo las órdenes
de Karasuma, militar del ministerio de Defensa de Japón y nuevo profesor de
educación física de la clase 3-E. Pese a la amenaza que supone la existencia de
semejante ser, los alumnos irán desarrollando sus habilidades y conseguirán ir
creciendo bajo las enseñanzas de su nuevo y particular profesor mientras
intentan conseguir la manera de matarlo para salvar la Tierra y conseguir su
recompensa. Pero las cosas no serán tan sencillas, ya que varios países
intentarán acabar con Korosensei enviando a nuevos alumnos (un robot armado,
una especie de versión “humana” con poderes semejantes a los de Korosensei…) o
asesinos encubiertos. ¿Podrán los alumnos de la clase 3-E sobreponerse a todo y
acabar con su profesor?
Opinión
En general tengo que decir que la serie me ha gustado
bastante. En ningún momento se me ha hecho pesada, incluso estando acostumbrado
últimamente a ver series de temporada (12 episodios), y me he quedado con ganas
de más. Quizá la sensación no sea tan grande como con otras series porque la
serie finaliza en unas vacaciones, lo cual da una sensación de punto y aparte
que facilita el poder dejar aparcada la serie un tiempo hasta que haya que
volver con ella.
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...o tendré que vengarme |
En general, la serie compensa algunos de los problemas
clásicos de las series de instituto gracias al objetivo del asesinato que deben
realizar. A mí uno de los que más me ha chocado siempre es que en una clase de
20-25 alumnos, normalmente sólo conocemos a 4-5 mientras que el resto son poco
menos que relleno. Tampoco es que Ansatsu Kyoushitsu tampoco puede presumir de
darle un trasfondo amplísimo a muchos de sus personajes, pero aunque sea breve,
hay muchos de ellos que tienen su momento de gloria. Obviamente, siempre hay un
protagonista, que en este caso es Nagisa, y unos secundarios algo más
relevantes que el resto (citaría a Karma y Terasaka quizá como los principales
entre los alumnos y al profesor Karasuma), pero hay muchos otros que también
tienen unas personalidades definidas, aunque quizá demasiado centradas en
clichés (el pervertido, la chica despreocupada, la chica buena en gimnasia,…). Y a fin de cuentas, todos terminan bailando al son que marca Korosensei.
Por otro lado, la serie nos va presentando a más
personajes poco a poco que suelen servir como antagonistas, aunque algunos
acaban cambiando de bando. Y es curioso que, pese a su amenaza de destruir la Tierra,
la serie consiga que no veamos a Korosensei como el malo de la película.
Realmente lo es y los alumnos, pese a todo lo que les une a su profesor,
elaboran cada vez planes más elaborados y mejor ejecutados para terminar con la
vida de su profesor. O quizá precisamente es por todo lo que les une, ya que
cuanto más progresa la serie, más se percibe que el odio que los protagonistas
profesan a los antagonistas, y que se transmite al espectador, no se debe a que
estos quieran matar al profesor. Lo que no quieren los alumnos es que no sean
ellos quienes consigan acabar con su profesor, que les anima a perfeccionar sus
habilidades para conseguir acabar con él.
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Korosensei adaptándose a la cultura japonesa. |
Siguiendo con el hilo de los antagonistas, otro punto a
favor de ellos es que cumplen su papel a la perfección. Aunque haya algunos que
cambian rápidamente de “bando”, consiguen que les cojas bastante odio. Un caso
paradigmático me pareció el de Karma, que cuando lo presentan es bastante
insoportable y odioso pero que antes del final del capítulo te acaba gustando (de
hecho sería de mis personajes favoritos de la serie). Pese al trasfondo de la
serie, que podría considerarse bastante serio, lo cierto es que la serie
mantiene un tono cómico en la mayor parte de sus episodios que ayuda a hacer
que la serie sea amena de ver. Aunque claro, podríamos plantear si sería
realista presentar un ambiente así con el marco que presenta la serie, pero el
anime es anime, supongo. Ahora sólo quedará sentarse y esperar qué
acontecimientos sacuden al instituto Kunugigaoka en el siguiente semestre.
Conclusión
En resumen, Ansatsu Kyoushitsu es una serie que
recomendaría ver en general. Me pareció bastante entretenida, sobre todo
gracias a algunos de los matices de la personalidad de Korosensei, como su afición
a las revistas porno, su reticencia a ponerse serio “porque arruina su rol como
personaje cómico”, su debilidad a montarse en barco porque se marea… Entre eso
y cuando van presentando sus diversas caras según su estado de ánimo (rayas
verdes cuando está confiado, blanco cuando se queda pillado, negra cuando se
enfada… o toma demasiado el sol…)
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Pues esto ya está terminado. Merezco un descansito |
La verdad es que la serie deja abiertas bastantes cosas,
como el hecho de que prácticamente todos los alumnos de la clase 3-E terminan
perfeccionando alguna de sus habilidades hasta el punto de hacerles útiles a la
hora de querer terminar con una especie de ser artificial (Korosensei defiende
que nació y se crio en la Tierra, algo confirmado sin mayores detalles por
Karasuma). Acaba habiendo gente con dotes atléticas poderosas, francotiradores,
alumnos destacados de química que prueban venenos,… Las típicas cosas que hacen
preguntarte por qué han acabado esos en la 3-E cuando la mayoría de los otros
alumnos, lo poco que salen, parecen aún más unos “mataos” que los de la clase
de los despojos. En otro orden de cosas, habría que ver cuáles fueron los
motivos para que Korosensei quisiera convertirse en el profesor de esa clase,
ya que es algo que solicita él explícitamente, y por qué les da el plazo de un
año antes de ejecutar su amenaza de destruir la tierra. Supongo que en el
futuro se aclararán estos y otros misterios ocultos en la serie.
Lo mejor.- Antagonistas y protagonistas cumplen su papel:
a unos los odias y a otros los apoyas. Las idas de pinza de Korosensei. Los
cortes de Karasuma a “Bitch-sensei” cuando le tira la caña. Karma, un poco OP,
pero interesante. La guía de Kyoto de Korosensei
Lo peor.- No hay tiempo material para desarrollar a los
personajes que están en un plano más secundario. El trazo del dibujo al principio se me hacía muy grueso y no era agradable visualmente. Los
openings no me gustan nada, ni canción ni coreografía ni nada…
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