domingo, 7 de febrero de 2016

One Punch Man



Introducción

¡Feliz año nuevo a todos! Sí, sé que llego con bastante retraso en lo que felicitaciones por el año nuevo se refiere, pero más vale fucker que nunca, ya sabéis. La cosa es que mis dos últimos artículos salieron bastante juntos porque tampoco quise retrasar uno para intentar aparentar una mayor actividad o, al menos, una mayor constancia. Como bien dije, ya he desistido de imponerme plazos y, aunque por norma general me gusta intentar ser constante en lo que hago, he dejado que las cosas fluyan a su ritmo natural sin preocuparme excesivamente por dejar periodos de inactividad.

¿Quién haría un artículo sobre ese calvo?
Releyendo el artículo de Tokyo Ghoul veo que dejé una puerta abierta a que ni siquiera fuera ese el último artículo del año, y sin embargo al final casi lo empalmo con el 2017 si me descuido… Lo cierto es que si bien otras veces he dejado de ver anime simplemente porque me apetecía más dedicar mi tiempo a otras cosas, esta vez lo que ocurrió es que vi que tenía bastantes episodios acumulados de One Piece y decidí ponerme a verlos. Como de ese tipo de series no hago artículos (quizá podría estar bien hacer artículos cuando concluya una saga…), he estado bastante desaparecido en el periodo del cambio de año.

Pero bueno, la verdad es que sí que me habría gustado venir antes pero no he tenido ningún fin de semana tranquilo en el que me apeteciera ver anime. En muchos de ellos no tuve tiempo de ponerme, y en los pocos en los que sí que tuve tiempo, al final me paseaba por la carpeta donde tengo todo el anime y no terminaba de notar ninguna serie que me llamase especialmente. Y como bien sabréis, para ver una serie yo tengo que notar que es el momento adecuado para verla, por lo que al final me ponía a hacer cualquier otra cosa.

Dale un respiro al chaval, super Tsundere-chan
El caso es que ahora ha surgido otra actividad que se ha sumado a la lista de cosas que me quita tiempo para ver anime, y es que además de traducir (estoy llegando al final de la decimotercera novela de High School DxD) y jugar (ya tengo un personaje decente en el Skyrim que puede luchar contra Dragones sin excesivos problemas), ahora he empezado a subir videos en youtube (juegos retro, en mi caso de Mega Drive), lo cual me lleva tiempo, principalmente en grabación y renderizado, ya que de edición apenas hago dos tonterías si me da mucho el punto. Pese a todas estas distracciones, lo cierto es que esta serie la terminé en dos días y podría haberla visto perfectamente del tirón, pero quise dejarla reposar un poco para saborearla como es debido. Y para no liarme más con esta introducción, ¡vamos adelante con el comentario de One Punch Man!


Información

One Punch Man nació en 2009 y originalmente como un webcomic obra de un autor que utilizaba el pseudónimo “One” para firmar su obra. La serie pronto gozó de una popularidad increíble en Japón, lo que llevó a la editorial Shueisha a pensar en editar la serie bajo su sello. Esto fue lo que nos condujo a su estreno en la Young Jump Web Comic a partir de mediados de 2012, prosiguiendo  su publicación en la actualidad. En esta versión, el guion sigue corriendo a cargo de “One”, pero el dibujo ha pasado a manos del ilustrador Yusuke Murata, entre cuyas obras podemos destacar la serie de fútbol americano, Eyeshield 21. Su éxito cristalizó con un anime de doce episodios que fue emitido entre octubre y diciembre de 2015 y que corrió a cargo del estudio Madhouse.

Nuestro héroe, Saitama
Centrándonos en lo que respecta a la serie, puede catalogarse como un manga de acción o de superhéroes, pero principalmente se trata de una parodia que busca siempre presentar el lado cómico de las situaciones que nos muestra. La historia de One Punch Man nos sitúa en la Tierra, pero en un mundo ficticio en el que principalmente conoceremos unas grandes metrópolis con claras semejanzas a las grandes urbes del país nipón y que son nombradas con simples letras, de la ‘A’ a la ‘Z’. No obstante, aunque veamos un mundo contemporáneo y aparentemente normal, las ciudades son sacudidas frecuentemente por las acciones de monstruos de todo tipo, que ocasionan todo tipo de destrozos y calamidades a su paso.

Como respuesta ante la amenaza que supone la existencia de todos estos monstruos, tendremos a nuestro protagonista, un hombre de 25 años llamado Saitama que en su día decidió entrenar hasta ser lo suficientemente fuerte como para hacer frente a todo este tipo de amenazas, pero tomándoselo como si fuera un simple hobby. Después de tres años de duro entrenamiento en el que perdió hasta el pelo, Saitama alcanzó un nivel de fuerza tan grande que termina derrotando a todos los enemigos que se cruzan en su camino de un simple puñetazo.

¿Será la nueva megaevolución de Heracross?
En medio de todas estas situaciones caóticas provocadas por monstruos de diverso origen (manipulación genética, seres creados a partir de la contaminación, extraterrestres, moradores del subsuelo o del mar…) que amenazan la subsistencia de la raza humana, Saitama terminará conociendo a Genos, un ciborg que se convertirá en su discípulo al reconocer este su tremenda fuerza. Sin embargo, pese a su tremendo poder y a sus múltiples actuaciones para eliminar a las criaturas que amenazan, Saitama no gozará del reconocimiento que merece ni siquiera tras ingresar en la Asociación de Héroes, donde se lleva un registro y un ranking de todos los héroes profesionales. Sin embargo, esto no mina ni un ápice la moral de Saitama, que sigue buscando un rival contra el que poder luchar sin que su abrumador poder sea un impedimento para disfrutar un buen combate. ¿Conseguirá encontrar a un rival contra el que poder luchar en serio?


Opinión

Aunque no suelo ver series relativamente recientes, lo cierto es que esta vez hice una excepción porque tenía ganas de ver cómo sería la serie que ha levantado tanto revuelo en estos últimos meses. Y lo cierto es que, al igual que me pasó con Tokyo Ghoul, no entiendo cómo puede haber un hype tan enorme como es el que hay con esta serie, pero no quiero que se me malinterprete. En general me ha parecido una serie entretenida y muy llevadera que ha sabido buscar su hueco en medio del panorama actual y limitarse a centrarse en lo que podía llevar a cabo, sin más.
 
No sabía que Sonic había ido a humor amarillo.
He visto los capítulos casi sin darme cuenta de que iba pasando el tiempo, lo cual siempre es algo positivo, porque significa que lo que estás viendo te entretiene. Siempre me he dicho que cuando miras el reloj del reproductor antes de llegar a la mitad del episodio de la serie que sea, eso es que algo no va del todo bien. Con esta serie, no me ha pasado en ningún momento y en cuanto acababa un episodio, empezaba inmediatamente con el siguiente para ver qué iba a pasar a continuación. Esto, en una serie en la que no hay una trama realmente de fondo, sino que, sobre todo en su primera mitad, nos presenta poco menos que episodios auto-conclusivos, es un logro que no puede ser tomado a la ligera.

En la segunda parte de la serie, cuando Saitama y Genos se unen a la Asociación de Héroes y se convierten en héroes profesionales, se deja entrever cierta trama en un segundo plano que puede que termina entremezclándose con los acontecimientos que nos cuenta Genos sobre cómo terminó convertido en un ciborg, que es lo único que tiene cierta relevancia y misterio, ya que de Saitama apenas vemos un pequeño flashback del momento en el que decide convertirse en un héroe. No obstante, es una baza que, al menos por lo que hemos visto, parece quedarse en un segundo plano pero que parece estar ahí para poder aparecer en cualquier momento dado.

Dime que tengo bien la junta de la trócola, por favor.
En cuanto al desarrollo del combate, lo cierto es que la serie no da para demasiado porque Saitama aparece como el héroe definitivo e invencible. Esto nos es presentado sin fisuras de ningún tipo, ya que a lo largo de los doce episodios no le veremos pasar apuros en ningún momento. Por el contrario, Genos asumirá el papel de “héroe vulnerable”, quizá más de lo que me gustaría. También esperaba una mayor tranquilidad en cuanto al sistema de ascensos de la Asociación de Héroes que hiciera que fuera más o menos interesante la cosa, pero no ha sido una baza que parezcan haber querido explotar con la serie, en beneficio del ritmo y, supongo, que para contrarrestar la ausencia de trama, como ya remarqué antes. Habrá que ver si en futuras temporadas nos muestran el camino que han decidido seguir con la serie para poder juzgar mejor.


Conclusión

Diría que One Punch Man es una serie muy entretenida, si bien yo diría que ha sido más graciosilla que realmente divertida. No recuerdo ningún momento de la serie en la que me haya reído bien, y es que hay muchos gags trillados y predecibles. Hay historias que se ve por donde van desde el primer momento, quitándole gracia a su desenlace; hay cosas predecibles, como cuando Saitama pasa apuros en un combate y termina resultando un sueño… No es su guerra, ni mucho menos, pero diría que es una serie bastante inconsistente, sobre todo en sus primeros episodios.

Vaya mosquitos se gastan en este mundo...
Pese a ello, no tengo reparos en decir que ha sido una serie que he disfrutado y que no dudaría en recomendar a quien quiera ver un anime en el que no le vayan a bombardear con una trama espesa. Además, en la serie se nos presentan a bastantes personajes que es de esperar que también vaya cobrando su importancia en la serie, traduciendo esto como número de apariciones, al estilo de lo que hemos podido ver de ‘Sonic’ en esta primera temporada. También habrá que ver qué van haciendo los héroes, sobre todo los de clase ‘S’ y Amai Mask, primer clasificado de la clase ‘A’, amén de alguna que otra sorpresilla que seguro que acaba saliendo a la luz.

Lo mejor.- El diseño de personajes me ha parecido bueno y variado para contraponerlo al diseño llano de Saitama. Los episodios se terminaban sin que te dieras cuenta de que había pasado el tiempo. La variedad y absurdez de muchos de los enemigos. El sistema de clasificaciones, niveles, rankings… me encantan esas cosas. La banda sonora y el opening, que lo vi en todos los episodios. Mumen Rider FTW. Que haya héroes con unas actitudes un tanto sospechosas.


Lo peor.-  En muchos momentos es predecible, lo que minimiza el impacto de lo que busca. La gente del mundo que nos presentan es bastante idiota, aunque muy aproximada a lo que sería en el mundo real, creo yo. Aunque sea la gracia de la serie, que Saitama sea tan fuerte no ayuda a que los combates resulten interesantes.

A Mumen Rider le gustó el artículo