Comentario de manga semanal LXXIX

Esta sección contiene detalles de la trama de las series mencionadas

Buenos días a todos. Por fin hemos tenido una semana más o menos tranquila en el trabajo, incluso con algunos momentos en los que he podido ir traduciendo algunas páginas más de las novelas de High School DxD, aunque haya sido poca cosa. Lo que no nos quita nadie es el hecho de tener que estar allí echando más horas que un tonto, así que al final acabas la semana cansado igualmente. En cualquier caso, ni todas esas horas serían capaces de hacer que me saltase mi cita semanal con el comentario de los últimos capítulos de manga. Cosa más delicada será el tema del análisis que toca esta semana, que apenas he visto media serie aún, aunque creo que llegaré aunque sea justito xD.

Aunque ahora que lo pienso, lo cierto es que creo que este año voy a tener mis primeras ausencias con el comentario del manga semanal, porque si no se tuerce nada voy a hacer un viaje a Japón. Sería por agosto o así, por lo que queda muchísimo, pero lo cierto es que desde que me decidí a apuntarme al viaje (que lo monta Capy, de NoSoloAnime, con su proyecto de japonentreamigos.com, al que os recomiendo que le echéis un vistazo si queréis viajar al país del sol naciente) prácticamente está siendo mi tabla de salvación en esos momentos en los que te dan ganas de levantarte, meterle con el teclado en la boca a tu jefe y mandarlo todo a la mierda. No sé qué haré esas semanas, pero os garantizo que no tendré tiempo de dedicarlo al blog, al menos tal y como lo he venido haciendo hasta el momento. Quizá tenga artículos especiales y luego cubra el hueco que voy a dejar mientras esté allí, la verdad que es algo que tendré que ir pensando.

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Tras ver como los Tontatta eran capturados y atacados de forma implacable por Trevor y como Nico Robin fue convertida en muñeca por Sugar mientras trataba de capturarla para llevar adelante el plan SOP, Usopp decidió que no tenía ninguna oportunidad contra sus enemigos y salió corriendo por el puerto en el que se llevan a cabo los negocios más oscuros del reino de Dressrosa. Pese a los destrozos causados por el propio Trevor, enseguida mandará a todos los juguetes de vuelta al trabajo, ya que estos se habían quedado paralizados al ver que por fin parecía que alguien estaba oponiéndose a Doflamingo después de tanto tiempo.

El héroe entra en acción... Ah no, que es Usopp

De repente, todos los Tontatta que estaban tendidos por el suelo frente a Trevor empezaron a gritar el nombre "Usoland", el nombre falso que les había dado Usopp para hacerles creer que era descendiente de Norland Montblanc, el héroe que los salvó años atrás. Leo le dirá a Trevor que pronto llegará su amigo y se convertirá en el héroe que los salve a todos: a los juguetes que son obligados a trabajar contra su voluntad, a los Tontatta que capturaron, al resto de juguetes que habitan en la superficie y deben mostrarse felices y serviciales pese a que por dentro estén sufriendo y a todos los humanos que ni siquiera son capaces de recordar que perdieron a sus seres queridos. Trevor se burlará de Leo y le dirá que es obvio que eso sólo eran mentiras, ya que ahora mismo están todos heridos y no ha ido a ayudarles en ningún momento. Sin embargo, Leo le grita que no permitirá que se burle de Usoland, que es un héroe de verdad y que les prometió que les ayudaría.

Esto no parece aplacar precisamente a Trevor, que empezará a pisarles mientras les invita a que llamen a su héroe. Justo en ese momento, aparecerá Usopp, que ha decidido dejar de huir tras escuchar que aún confían en él para que les salve, y le ordenará a Trevor que se detenga. Esto parece llenar de esperanza a los Tontatta, pero el propio Usopp les confirmará que lo que ha dicho Trevor era cierto. Que su nombre no es Usoland y que no es ningún héroe, sino Usopp, el francotirador de los mugiwara, un pirata. Sin embargo, les dirá que a partir de ahora sí que se convertirá en otro de sus héroes legendarios, junto a Noland, y pasará al ataque para proteger a quienes confiaron en él. La presencia de los mugiwara parece desconcertar a los juguetes, que no entienden que hace un pirata como él luchando contra Doflamingo en su propio reino.

Curos consiguiendo su victoria número mil.

La última parte del capítulo nos contará más sobre Curos, su historia y su relación con el Rey Riku. Cuando era joven, Curos fue perseguido por el ejército por cometer dos asesinatos en los barrios pobres. El mismísimo rey Riku fue a conocer a quien había sido capaz de cometer semejantes actos. Pese a ser atacado por Curos, el rey Riku le pidió que viniera con él y le envió a un lugar en el que pudiera emplear sus talentos: el coliseo Corrida. Allí le confesó al rey Riku que mató a esos dos hombres como venganza por haber matado a un amigo suyo y este le prometió que le dejaría libre si encadenaba 100 victorias consecutivas. Cuatro meses más tarde, Curos consiguió cumplir la condición impuesta por el rey, pero como la gente no quería que un  asesino volviera a las calles, este decidió seguir en el coliseo, donde terminó encadenando mil victorias consecutivas. Sin embargo, posteriormente le veremos llorando frente a una tumba, lamentándose de que nunca conseguirá alejar de si la fama de asesino que se ha creado durante estos años.

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Tras comunicarles su decisión de abrir la última puerta, todos los allí presentes se quedarán sorprendidos. Minato intentará detenerle, pero Gai le dirá que está decidido a hacerlo. Ni siquiera Lee podrá intentar convencerle de probar alguna otra alternativa. Gai le dirá a Lee que espera que pueda mirarle con una sonrisa, mientras ambos parecen recordar los inicios de Lee como ninja, en los que parecía no tener confianza alguna en sus posibilidades por no poder utilizar el ninjitsu hasta que Gai le dijo que él tampoco podía y que eso no le impedía poder rivalizar con un genio como Kakashi. Sin intercambiar más palabras, Gai se lanzará al ataque dispuesto a acabar con Madara abriendo la octava puerta.

Gai is on fire...

Pasaremos entonces a un flashback en el que veremos la juventud (real, no eterna) de Gai. Parece que Gai tampoco tenía demasiada confianza en sí mismo cuando era un niño, y se venía abajo por no haber sido capaz del entrenamiento al que le sometía su padre, Might Dai. Sin embargo, lo que realmente cabreaba a su padre era el hecho de que se disculpase por no haber sido capaz de hacerlo, no por el propio hecho de no hacerlo, ya que aquello suponía menospreciar el esfuerzo invertido en la tarea. Pese a que no era muy tomado en serio como ninja, al no haber sido capaz de ascender ni siquiera a chuunin, el padre de Gai le mostraba a su hijo siempre una visión totalmente optimista de las cosas. Fue Dai quien le inculcó que la juventud no dependía de la edad, sino que era un estado mental.Sin embargo, esto no fue interiorizado inmediatamente por Gai, que fue ingresado en el hospital tras luchar contra dos ninjas que se burlaron de su padre.

Tras este episodio, Dai le explicó a su hijo que una victoria no consistía en derrotar a alguien fuerte, sino en conseguir proteger algo valioso para uno mismo. Posteriormente, Dai sorprendió a Gai cuando se decidió a enseñarle la apertura de las puertas, la única técnica que consiguió desarrollar en su carrera como ninja, aunque había ciertas condiciones para su activación, tal y como años más tarde le inculcó el propio Gai a Lee. Pasaremos después a ver el momento en el que Dai se sacrificó en una lucha contra los siete espadachines de la niebla, que habían acorralado al grupo de Gai, Ebisu y Genma. Recordando ese momento en el que su padre se sacrificó para protegerle a él, lo que más valoraba en el mundo, ahora es Gai quien abre la última puerta para enfrentarse a Madara. Este se burlará de él, pero Gai le dirá que aunque muera, se convertirá en el abono que hará que crezcan nuevas hojas verdes.

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Tras liberar su shikai, hasta Isane parece sorprendida de ver el alcance del poder de Yachiru. Sin embargo, Yachiru pronto dejará claro su carácter cuando empieza a hacer el tonto con los dos seres que invoca gracias a su shikai. Sobreponiéndose un poco a su sorpresa por dicha revelación, Isane se da cuenta de que no se trata de que su zanpakutoh cambiase de forma para adoptar otra forma, como pasaba en los casos de Unohana o Hitsugaya, sino que parecía que el poder de la propia espada se había materializado, tal y como ocurría con algunos bankai.

Aparece un nuevo enemigo...

Mientras Isane no daba crédito a lo que acababa de ver, Guenael volverá a aparecer sangrando con un corte justo en el medio de la cara. Yachiru parece algo extrañada, ya que creía que le había conseguido cortar en dos, pero parece que la victoria no será tan sencilla. Cuando Guenael se prepara para volver al ataque, se detiene de repente. En ese momento, Isane se da cuenta de que hay un intruso dentro de la barrera donde se encuentran Kensei y Rose. Guenael le dice que aún puede seguir luchando, pero el nuevo quincy parece no estar muy dispuesto a escucharle y hace que Guenael explote tras decirle que ha desaparecido de su memoria. Isane le dirá que salga de la barrera inmediatamente, pero el recién llegado le dice que no tiene sentido de que se preocupe más por los dos capitanes que estaban dentro, ya que ya los había matado.

Ante tal declaración, Isane acudirá corriendo al lado de Rose y Kensei y certificará que lo que ha dicho el quincy era cierto: los dos están muertos. Yachiru cargará contra él, pero este esquivará el ataque sin ningún problema. Al tocar a Yachiru, a esta se le caerá la zanpakutoh, como si se le hubiera roto el brazo. El recién llegado le dirá que se imagine que sus huesos fueran realmente galletas y acto seguido Yachiru caerá al suelo. Tras esto, revelará que tiene el poder de hacer que todo cuanto imagine se haga realidad, pero enseguida se rompe una pared con un gran estruendo. Al otro lado aparecerá alguien a quien todos teníamos ganas de ver en acción: Zaraki Kenpachi.

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Mientras Wendy se dirige con Charle hacia el emplazamiento de Face sin tener la menor idea de cómo van a conseguir detener su activación pero dispuestas a no desaprovechar la ocasión que les han brindado sus compañeros, la pelea dentro del cuartel general de Tartaros sigue adelante. Natsu y Lucy se enfrentarán a Franmalth, que tras ver que su primera táctica no era demasiado efectiva decidió sacar el alma más poderosa de cuantas atesora: la de Purehito. Franmalth les explicará que mientras seguía los pasos de Zeref unos años atrás, terminó encontrando su cuerpo. Pese a que era un humano, Franmalth les dice que era más parecido a un demonio y que tenía un poder mágico sorprendente.

Franmalth utilizando el alma de Purehito

Pese a que en un principio les sorprende ver que su enemigo ha sido capaz de absorber el alma de Hades, que fue el segundo maestro de Fairy Tail antes de pasar a formar el gremio oscuro de Grimoire Heart, Natsu pasará al ataque revelándole a Franmalth que fueron ellos quienes le derrotaron en su día. El primer ataque de Natsu impacta de pleno, pero no parece ser demasiado efectivo y Franmalth, que pone en duda que ellos solos pudieran derrotarle, responde pasando a la ofensiva también. Tras un breve intercambio de golpes, Franmalth consigue enganchar a Natsu con una de las cadenas que utilizaba Hades e intentará absorber su alma. Natsu reacciona a tiempo para esquivar el intento de absorción de su enemigo y utiliza los poderes de rayo de los que dispone desde que absorbió la energía mágica de Luxus para lanzar uno de sus ataques más poderosos.

No obstante, Franmalth se prepara para absorber el ataque de Natsu al igual que lo hace con las almas de aquellos con los que lucha, por lo que el ataque sólo consigue darle un poder mayor. Este le dirá a Natsu que le parece bien que fuera capaz de derrotar a Jackal, pero que no debería subestimar a los demonios del libro de Zeref. En un paso rápido por otros combates veremos que Mirajane y Erza también están teniendo unos duelos complicados con Sayla y Kyouka, respectivamente. Por último, veremos que Wendy y Charle ya han llegado al lugar donde se encuentra Face, pero parece que les aguarda una sorpresa inesperada: ¿Ya han llegado miembros de Tartaros a la zona?

Semana entretenida la que hemos tenido, aunque haya habido algunas cosas algo más flojitas. Por ejemplo Bleach, que creo que la evolución de este combate ha venido marcada porque ni siquiera Tite Kubo sabía como salir del lío en el que se había metido con las fases de poderes de Guenael y su interrelación con Yachiro e Isane y tiró por la calle del medio sacándose de la manga un tío que hace verdad todo lo que imagina. Habrá que ver cómo limitan su poder, porque si no tiene límites y pierde, es que es más gilipollas de lo que parecía. Y máxime contra Zaraki, que no tiene planes secundarios ni estrategias, sino que se limita a pegar. La irrupción de Zaraki hace que, además, el shikai de Yachiru haya perdido importancia. No sé si lo combinará, pero a Zaraki no le pega mucho la verdad.

En One Piece hemos tenido el típico momento en el que Usopp decide sobreponerse a su cobardía y empezar un combate que sabe que no tiene muchas posibilidades de ganar. Ha quedado bien, pero ha roto un poco la hombría de la que hacía gala desde que volvimos del parón de los dos años. Espero que al menos ofrezca un espectáculo digno y les de una alegría a los pobres Tontatta. Ojo a la reacción de Sugar cuando Trevor se burla de los Tontatta por confiar en alguien que dice ser un héroe, que no descarto que al final Sugar cambie de bando... Habrá que esperar, porque la semana que viene One Piece se ausenta de la WSJ. En Fairy Tail hemos visto poco más que un intercambio de golpes entre Natsu y Franmalth, que ha revelado tener el alma de Purehito. Sus poderes de absorción hacen que sea un rival difícil de vencer, por lo que habrá que ver lo que hacen Natsu y Lucy para acabar con él.

En Naruto hemos tenido un flashback de esos que están hasta bien y que Kishimoto demuestra que sabe hacer si se lo propone. Un tamaño ajustado, una historia interesante sobre la niñez de Gai y de paso se nos presenta a un personaje como Dai. Interesante ver cómo fue él quien inculcó el carácter de Gai y es que, pese a que muchas veces se utilice como un recurso cómico del personaje, está demostrando que para nada era un concepto vacío. Lo que sí que habrá que ver es si el sacrificio de Gai, que supongo que tras abrir la octava puerta morirá de manera irreversible, es realmente efectivo y afecta a Madara o sólo conseguirá ganar algo de tiempo para Naruto y compañía, como pasó con la muerte de Neji. Sería una pena ver caer a un personaje así por una meta tan pobre, pero quizá también sirva para que Lee de un paso al frente, igual que hicieron en su día otros como Shikamaru.