Comentario de manga semanal LIV

Esta sección contiene detalles de la trama de las series mencionadas

Aquí estamos una semana más con la sección en la que comentamos los últimos capítulos de las principales series de manga (que sigo yo, claro está xD). Empezamos el mes de septiembre con la vuelta de Bleach después de haberse pegado un agosto que ni Suzumiya Haruhi pero en tocamientos. Ahora sólo queda ver si la vuelta será un motivo de alegría o de lamento, que ya sabemos que Tite Kubo ha perdido mucho el norte con su propia creación. Por otro lado, esta semana toca preparar el análisis de una serie y ya tengo prácticamente vista la siguiente. Y es que entre el rush final de mis vacaciones y esta semana en la que apenas he tocado la Xbox, la cosa ha cundido bastante por lo que respecta al vicio del anime. Aunque haya sacrificado un poco la 360, no es menos ciertos que he conseguido que mi módulo de ram vuelva a funcionar y eso me ha abierto el mundo del battlefield 3 y demás juegos de PC que tenía abandonados, así que a ver cómo acaba la cosa...

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Volvemos una semana a ver qué hacen nuestros piratas favoritos, aunque seguiremos centrados en el capitán de los Mugiwara, Luffy. La semana pasada vimos como terminaban por fin las eliminatorias del tercer bloque del torneo que se lleva a cabo en el Coliseo Corrida. Como no podía ser de otro modo, Luffy termino imponiéndose en el duelo contra Don Chinjao de forma espectácular, reventando la plataforma sobre la que se celebraban los combates. Eso ha provocado un retraso en el comienzo de las eliminatorias del bloque D y ha permitido a Cavendish volver a la carga contra Luffy en el mismo momento en el que volvía por los pasillos interiores del Coliseo.

¿A que no sabes con quién estoy hablando?

Pese a que en principio no se permiten los altercados entre concursantes fuera de la arena, lo cierto es que parece que nadie tiene ganas de meterse en una pelea entre Cavendish y Luffy, pero esto nos permitirá conocer unos pocos datos sobre otro de los que sabíamos que tenían al joven de goma entre sus objetivos. Mientras combaten en el pasillo, Bartolomeo escuchará como dos hombres han reconocido a Luffy pese a su disfraz y su falso nombre y se ríen de él por no haber sido capaz de salvar a su hermano en Marineford. Esto cabreará bastante a Bartolomeo, que aplastará a los dos hombres contra la pared y les dirá que no permitirá que se rían del que será el Rey de los Piratas de esta era. Bartolomeo presenció lo sucedido en Logue Town, cuando Luffy subió al mismo cadalso donde fue ejecutado Gol D. Roger y casi pierde la vida a manos de Buggy. La proclama de Luffy, diciendo que no se arrepentía de nada y que él sería el próximo Rey de los Piratas, unido al rayo que le salvó (del que sospechamos que su padre, Monkey D. Dragon tuvo algo que ver), hizo que aquel joven despertase su admiración y decidiera posteriormente hacerse a la mar como un pirata más. Tal es su veneración hacia Luffy que ni siquiera puede acercarse a él para detener su pelea contra Cavendish.

Por su parte, mientras Luffy luchaban contra Cavendish, Sai y Boo se acercan mientras cargan con Don Chinjao y le dicen que su abuelo tiene algo que decirle. Realmente Don Chinjao quiere manifestarle su agradecimiento a Luffy, debido a que el golpe con el que le derrotó ha devuelto su cabeza a la forma tan peculiar que tenía antes de su encuentro con Garp, lo cual le permitirá volver a romper el hielo que custodiaba su tesoro. Pero al inclinarse su cabeza golpea el suelo, abriendo una fisura que Luffy interpretará como un ataque. Don Chinjao no tiene éxito al comunicarle a Luffy que le cede el ejército que el formó y que ahora comandan sus nietos bajo su protección, ya que este huirá al ver como el golpe abre todo el suelo. En su huida, pronto alguien llamará su atención para que vaya por un pasillo poco transitado y despistar a sus perseguidores. Esta será Rebecca, la joven gladiadora que vimos en el salón de armas. Mientras caminan más tranquilamente tras haber despistado a Cavendish, Luffy se encontrará con Jesus Burgess, que estaba hablando con su capitán, Kurohige, sobre algo relacionado con Shilliew y Aokiji, aunque dice que no pueden fiarse de este último.

Te perdono porque no se me ha caído la comida, si no...

 Cuando Burgess advierte la presencia de Luffy se lo dirá a su capitán, que parece encantado de que esté allí y seguro de que será el miembro de su tripulación quien conseguirá la Mera Mera no Mi. Así sería como si Ace se hubiera unido a su banda, lo cual rechazó varias veces, algo que Luffy le advierte que no tolerará. Luego, Luffy y Rebecca seguirán su camino hacia una especie de habitáculos/prisiones donde habitan los gladiadores, donde nuestro protagonista se para a zamparse algo que le compró Rebecca poco después de su encuentro con Burgess. Sin embargo, no todo será tranquilidad, ya que todo parece una emboscada. Unos gladiadores heridos atraparán a Luffy y Rebecca intentará matarle con su espada, pero Luffy se zafará enseguida y desarmará a la gladiadora, que le dirá que aceptará cualquier castigo. Luffy le dirá que no piensa hacerle nada a alguien que le ha invitado a comer, perdonándola aunque hubiera tratado de matarle, ya que al final no pasó nada. Entonces conoceremos que los gladiadores que le sujetaron eran gladiadores detenidos allí. Su anhelo es ser libres de nuevo, para lo cual deben ganar mil combates seguidos, algo imposible para ellos, por lo que habían planeado hacerse con la Mera Mera no Mi y rebelarse contra Doflamingo, sabiendo que el Reino Tontatta también atacaría pronto. Parece que la saga toma forma ya...

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Y ahora pasamos a nuestros ninjas, que siguen liados en una guerra en la que se decidirá el futuro del mundo ninja tal y como lo conocemos ahora. La semana pasada habíamos dejado a Minato en medio de un arranque sentimental que Naruto echó por tierra, ya que ahora tienen que centrarse en lo que tienen delante de ellos. Al mirar a Naruto, concentrado en ver cuál será su siguiente paso, Minato pensará en que su hijo le recuerda a su mujer, Kushina, lo cual es bastante nostálgico para él. El peso del ataque seguirá centrado en Minato, Tobirama, Sasuke y Naruto. Este último concentrará el chakra de Kurama y saldrá lanzado al ataque... hasta que Tobirama le recuerda que el Senjutsu es lo único que funciona contra Obito.

Naruto, en el nombre de la madre...

Naruto se detendrá tras escuchar eso, ya que se había olvidado por completo, lo cual le vale algunos comentarios jocosos por parte de Tobirama, que afirma que es igual de estúpido que su hermano, y hasta del propio Kurama, que dice que al menos ya hay algo en lo que ha superado a todos los hokages, refiriéndose a su estupidez. Sin embargo, Kurama le dice que no tiene nada de lo que preocuparse, ya que ahora debería ser capaz de utilizar el modo ermitaño mientras utiliza su chakra. El Kyuubi le recordará que en su enfrentamiento contra Pain sus poderes parecieron sincronizarse. Naruto le recordará que en su día fue él quien impidió que realizase bien su entrenamiento con los sapos para perfeccionar el senjutsu, a lo que Kurama responderá que no quería que utilizase ese poder pudiendo emplear su chakra (y que no quería compartir sitio con un sapo).

Minato, que posee parte del chakra del Kyuubi en su interior, se prepara para actuar de apoyo en el ataque a Obito. El cuarto Hokage preparará un rasengan gigante al que Naruto le añadirá senjutsu y utilizarán el Shiraisin de Tobirama para volver a lanzar un ataque a espaldas de su enemigo. Sin embargo, este detecta lo que pretenden y puede cubrirse a tiempo. Al ver que han fallado, Naruto planea realizar una bijuudama con chakra del modo ermitaño, pero Obito parece que no está dispuesto a dejarles conseguirlo y empieza con la técnica del Tsukiyomi infinito, algo que sorprende incluso al propio Madara, que sigue luchando con Hashirama.

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Y aquí vuelve el hijo pródigo... Vuelta a la shounen jump de Bleach con lo que será su última saga: la sangrienta batalla de mil años, el capítulo del adiós. Habíamos dejado a los quincy bajo el mando de Juha Bach en pleno ataque a la Soul Society, que había empezado a desaparecer en el aire para asombro de los shinigami. Haremos un recorrido por algunos de los oficiales de los shinigami. Por ejemplo, Shunsui no parece para nada sorprendido, ya que revela que esperaba que pasara algo así, aunque no el hecho de que lo hicieran de forma que arruinasen todas las trampas que tenían preparadas. También veremos como Kiyone y Sentarou se dirigen hacia Ukitake, que está observando lo que está sucediendo.

¿¡Que los JJOO no se celebrarán en la Soul Society!?

En la sede de la duodécima división sus miembros no salen del asombro por lo que ven. Algunos incluso parecen dudar de las lecturas que arrojan todos los sensores y máquinas que tienen allí, pero tal y como dice Akon, lo que está pasando delante de sus ojos es algo innegable.  Será Juha Bach quien nos revele lo que está sucediendo, y es que cuando los quincy fueron derrotados y casi exterminados por los shinigami, estos huyeron hacia la Soul Society, en concreto al Seireitei, ya que era el lugar menos vigilado por su propia arrogancia. Allí, crearon un mundo en las sombras de la Soul Society, valiéndose de todas las partículas espirituales existentes: el Wandenreich , el imperio invisible.  Así, pasaron mil años reuniendo poder en las sombras y esperando a que llegase su momento. Como bien dicen, nunca han invadido el seireitei, es que siempre han estado allí. Lo único que han hecho ha sido salir de escondite, razón por la que en ninguno de los ataques hubo lecturas sobre la vía por la que entraron los intrusos en la Soul Society. Algunos miembros de los Sternritters empezarán a ir apareciendo en localizaciones concretas.

Uno de ellos aparecerá en la división doce, donde veremos aparecer a Mayuri con un traje luminoso que sorprende hasta a sus hombres. Kurotschi afirmará que sospechaba que los quincy se escondían en las sombras, en un mundo que estaba en el mismo lugar que el suyo pero sin tocarse, por lo que se preparó para cuando llegase el momento. En las calles del seireitei, Buzz B estaba acorralando con fuego a los shinigami, pero Hitsugaya y Matsumoto le cortarán el paso. Mientras tanto, en la sede de la primera división, será Jugram, el lugarteniente de Juha Bach, quien aparezca directamente ante Shunsui. La cena está servida...

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Turno para los magos del gremio de moda, Fairy Tail. Tras luchar contra Doriarte, miembro del gremio oscuro Succubus Eye, este acabó revelándose como un demonio similar a Deliora. Por suerte, su magia de regresión se deshizo, por lo que todos nuestros protagonistas recuperaron su verdadera fuerza. Tras adquirir su verdadera forma, este se abalanzará sobre Gray, que apenas puede esquivar los ataques que le lanza, ya que pese a su tamaño, es bastante ágil. En un momento del combate, Doriarte lanzará un grito que resonará por todos los alrededores y que volverá a convertir en niños a nuestros protagonistas.

Omnomnomnmonmonmon...

Pero no sólo a nuestros protagonistas, ya que también afectará a la propia Minerva, que parece que pronto dejará de suspirar de alivio pensando en que su compañero sigue vivo y en plenas facultades. Afectará también a Lucy, Wendy, Flare, Happy y Charle, que en principio se encuentran bastante lejos., así como a los tres miembros del gremio de cazadores de tesoros. Happy y Charle verán como sus alas desaparecen y caerán al lado de Gray. Este intentará atacar con su magia de hielo a Doriarte, pero con su fuerza nuevamente reducida no está consiguiendo ningún efecto. Al final, Gray acabará siendo golpeado por uno de los brutales golpes de su enemigo, que lo lanzará volando por los aires. Cuando parece que Gray no será capaz de rehacerse a tiempo para evitar el segundo ataque de su enemigo, Happy y Charle utilizarán todo su poder mágico restante para volar una vez más y salvar a Gray.

Este, mientras tanto, pensará que con su hielo no va a poder hacerle frente, pero que si puede utilizar el hielo que cubre todo el poblado puede que sí que lo consiga. Sorprendentemente, Gray conseguirá canalizar el hielo que cubre todo en su cuerpo y contraatacar a Doriarte, haciendo que todos vuelvan a recuperar de nuevo su tamaño normal. Doriarte, que ha vuelto a recuperar su forma humanoide, le dirá a Gray que al final han sido ellos quienes han abierto la puerta al infierno y que ya no podrán remediarlo. Pero no podrá decir nada más, ya que enseguida aparecerá el extraño monstruo volador que vieron Happy y Charle y engullirá al demonio derrotado.

Bueno, pues llegamos al fin del comentario de esta semana. Lo cierto es que con la vuelta al curro y tal he estado un poco off. De hecho, no he leído los capítulos hasta el mismo viernes, cuando normalmente soy de los que a partir del miércoles se pasan unas cuantas veces para ver si han salido los capítulos. La semana tampoco ha llegado muy cargada que digamos, a excepción de One Piece. Ni siquiera la reaparición de Bleach ha tenido la fuerza que esperaba, aunque no es menos cierto que el capítulo ha tenido algunas explicaciones (aunque no me convencen nada, pero algo es algo). La cosa parece que va a empezar con calma y apenas nos han presentado unos posibles combates iniciales y tendremos que esperar hasta que empiece la acción más seria. Empieza con la de cal...

En Naruto seguimos avanzando poco cada capítulo, ya que hay mucha charla sobre tácticas y estrategias de combate que realmente dan para poco progreso, aunque es algo necesario también. Parece que va a empezar el desenlace final de la batalla, ya que si Obito ha dado comienzo al plan del tsukiyomi infinito, o lo paran o mal vamos. En Fairy Tail parece que Gray ha hecho sin querer lo que había ido a hacer el enemigo. Aunque por otro lado, si deshacer el hielo iba a desatar un mal tan grande como el que dicen, ¿por qué Walrot les hizo el encargo de ir a estudiar el hielo? Aún quedan muchas cosas por conocer, aunque no esperaba que esta saga tuviera tanto que ver ya con el tema de abrir las puertas del infierno, algo que escuchamos ya en la saga anterior. Pensaba que darían un par de vueltas con sagas intermedias antes de volver a hilar todo, pero parece que no va a ser así.

Y me dejo lo mejor para el final. En One Piece hemos finalizado ya el bloque C, pero no es eso lo más importante del capítulo. El tiempo que tendremos que esperar para que reparen el escenario y dé comienzo el bloque D nos ha servido para conocer unas cuantas cositas. Por un lado, relativo a la historia de Dressrosa y el drama de los gladiadores que están allí encerrados y malheridos y que buscan acabar con Doflamingo. De hecho, ya sabíamos que Rebecca conocía al soldadito que acompaña a Franky y que vimos unos cuantos capítulos atrás como uno de los líderes de la revuelta del Reino Tontatta. Es de esperar que Luffy se preste a ayudarles, ya que hemos visto que si tiene que ayudar a alguien le da igual enfrentarse al gobierno mundial, a gobiernos (Skypeia por ejemplo) o lo que sea. Por otro lado, estamos viendo como esta parte de la serie promete ser mucho más apasionante de lo que hemos visto hasta ahora, ya que empiezan a verse alianzas entre varios piratas. Si por un lado teníamos a Kidd, Hawkins y Apoo, por el otro teníamos a Luffy y Law, a los que parece que pueden unirse Bartolomeo, sorprendente admirador de Luffy, y Don Chinjao y su armada. Parece que se acabo eso de llegar a un sitio y cargarse al pirata/enemigo de turno. Parece que se avecinan curvas, y recordemos que Luffy tiene el objetivo actual de acabar con Kaidou y también se ganó la enemistad con Big Momma, por lo que cualquier ayuda se va a quedar corta.