jueves, 28 de febrero de 2013

High School DxD




Introducción

Y aquí estamos de vuelta con otro análisis de una serie. La verdad es que me habría gustado esperar un poco más y así ir poniendo un análisis al mes, pero qué carajo... lo pongo ya y punto. Además, como este mes ha sido cortito apenas hemos tenido ocasión de ver comentarios de manga semanal, así que aprovecho para hincharlo un poco metiendo un segundo análisis en febrero. De hecho, mi idea era publicarlo ayer, pero eso de ver tan cerca el final de la Regular Season del NBA2K13 me hizo dedicarme a ello de pleno y al final se me hizo un poco tarde. Que no es que hoy lo vaya a publicar mucho antes, pero ea...

Que no soy el power ranger rojo, coño ya...
Por lo que respecta a la serie, es una de esas que me bajo sin saber directamente de qué va. Pero vamos, lo que se dice no tener ni idea en absoluto. Siempre es grato hacer el clásico "A ver si me sorprende" y finalmente la sorpresa existe y es grata. Y es que esta serie probablemente sea la que más me ha gustado de todas cuanto he visto y cuyo análisis os he traído a TTOF. Además, se da la casualidad de que  también trata de Demonios y Exorcistas como Ao no Exorcist. Aunque en este caso, veremos que el protagonista acaba enrolado en el bando de los Demonios y que la situación no será tan "simple" como en la serie que protagonizó mi análisis anterior.

La verdad que High School DxD me ha dado un hype impresionante, tanto es así que incluso me decidí a traducir las novelas que dan origen a la serie (que por cierto, las publico en el blog Oh My Gackt Translation, aka OMGT). Y es que esta serie tiene algo que siempre he buscado y que raramente he encontrado, aunque tampoco es menos cierto que tampoco he investigado demasiado el tema. Por fin alguien se decide a hacer una serie con una carga erótica relevante pero que a su vez no se limite a enseñar cacho. Y ojo, que cacho hay para dar y tomar, pero la serie no lo utiliza como un objetivo en sí, sino como un medio más que ilumina una trama que, repetimos lo de siempre, no es una obra maestra, pero que si tiene su miga y su punto serio. Espero que haya una segunda temporada pronto y poder traer aquí unas impresiones sobre la continuación de la serie, que hay ganas de ver cómo sigue todo.

Pero bueno, no os voy a liar más, así que aquí os dejo ya con el análisis de HighBoobSchool DxD

Ponte cómodo y a leer el artículo~

Información

High School DxD es un anime cuyo origen se encuentra, volvemos a las andadas, en una serie de novelas ligeras escritas por Ichiei Ishibumi e ilustradas por Miyama-Zero que llevan publicándose desde septiembre de 2008 en la revista Dragon Magazine, perteneciente a la editorial Fujimi Shobô (una subsidiaria de Kadokawa Shoten). Hasta el momento se han editado 14 volúmenes, el último de ellos publicado recientemente, en enero de 2013, pero la serie de novelas seguirá, estando planificado el lanzamiento de la decimoquinta novela para mayo de este mismo año. Como es habitual, cuenta con una línea de manga cuyo guión corre a cargo del propio autor de la novela y que es publicada en la revista Dragon Age, igualmente de la editorial Fujimi Shobô.

Tres fuckers y un destino... 
Por lo que respecta al anime, se ha emitido una primera temporada a principios de 2012 que consta de 12 episodios, 6 especiales y una OVA que se sitúa como el episodio número trece. Se ha planificado el lanzamiento de una segunda OVA que acompañará el lanzamiento de la decimoquinta novela. High School DxD es una serie que podemos encuadrar fácilmente en el ecchi (de tipo harem), fantasía y comedia. En ella, se nos contará la historia de Hyoudou Issei, un estudiante de segundo año muy sanote, con las inquietudes clásicas a esas edades. Vamos, que nos encontramos en el punto de partida con un protagonista que es un salido de primera, sólo igualado por sus dos grandes amigos Matsuda y Motohama. Es por eso que, pese a acudir a un instituto que había sido exclusivamente femenino hasta hacía poco y cuya proporción de chicas superaba claramente a la de chicos, no tienen ningún éxito en sus intentos de encontrar novia y tienen que conformarse con espiar los vestuarios siempre que pueden, lo cual no mejora la imagen que se tiene de ellos, y ver porno a todas horas.

No obstante, un día ocurrirá un milagro inesperado. Mientras volvía a su casa, una chica guapísima que dice llamarse Yuuma  se le declara a Issei. Este, obviamente, aceptará encantado y comenzará a salir con ella, aunque algo raro ocurre durante su primera cita. Cuando Issei creía que iba a dar su primer beso, Yuuma despliega unas alas negras y le atravesará con una lanza que desprendía una luz extraña. Todo parecía indicar que iba a morir, pero en ese momento le parecerá ver a alguien con una larga melena de color rojo brillante que se acerca a él. Al día siguiente abrirá los ojos en su propia cama y verá como nadie parece recordar a Yuuma, que ha desaparecido. Todo eso le hace pensar que ha debido tratarse de algún tipo de sueño, pero…

¡No me dijiste que te iba el BDSM!
Al mismo tiempo, su cuerpo empieza a experimentar una serie de cambios: sentidos agudizados, agilidad y resistencia superiores a lo normal… Una noche, mientras paseaba, será atacado de nuevo por otro ser con alas negras en su espalda y que llevaba una lanza igual a la que recordaba que había utilizado Yuuma para atacarle. Tras ser atacado, Issei será salvado por la chica más popular de su instituto, Rias Gremory, que en realidad es un demonio que utiliza el club de ocultismo del instituto como una tapadera y que le ha convertido en su sirviente. Aunque en un principio le encargue misiones sencillas y le conceda el rango de peón, el más bajo posible, pronto descubrirá que en su interior alberga un artefacto sagrado de gran poder y que al igual que dicha pieza de ajedrez, puede obtener las habilidades de cualquiera de las demás piezas, a excepción del rey. ¿Podrá Issei adaptarse bien a su nueva naturaleza demoníaca? 


Opinión

Cuando se ve una serie ecchi con una carga explícita tan grande, aunque obviamente no llega a caer en el sexo porque habría que englobarlo como un hentai, es fácil despreciar todo lo demás y quedarse con que se trata de un simple conglomerado de situaciones forzadas con el único propósito de sacar tetas por todos lados. Y no nos equivoquemos, es obvio que situaciones como las que he citado se dan constantemente a lo largo de todos y cada uno de los capítulos, diría incluso que sin excepción, aunque esté hablando de memoria. Sin embargo, una serie ecchi que carezca de una trama medianamente interesante es de los más aburrido que pueda echarse uno a la cara, sobre todo a una edad y en una época como esta en la que puedes encontrar cualquier cosa en la red, if you know what I mean…

La babosa corroe ropa femenina... el mejor amigo
del hombre y del diablo... xD
A lo que voy es que no suelo guardar mala impresión de los animes que he visto. Algunos me han gustado más, otros menos, pero generalmente siempre soy capaz de extraer algo que me haya resultado interesante, y me alegro de este hecho, ya que soy alguien que no deja un anime a medias. No obstante, si alguien me pidiera alguna vez que le citase un anime que no le recomendaría ver a nadie bajo ninguna circunstancia, mi candidato sería un anime ecchi, en concreto, Amaenaideyo. Unos personajes que no me comunicaron nada, una historia que me parecía absurda y plana…  No basta con sacar chicha de vez en cuando, todo anime debe tener una historia formada que haga que el espectador quiera saber cómo sigue la historia y qué le pasará a tal o cual personaje. Esto se cumple en el caso de High School DxD, y eso que su carga fanservicera es infinitamente mayor (aunque también es cierto que pude ver una BD rip que entiendo que se comía toda la censura que tuvo la versión que pasaron en la televisión) que la del anime que he mencionado.

Después de una introducción larga, pero entiendo que necesaria, hablemos estrictamente de la serie que nos ocupa. Empieza con elementos bastante habituales… un protagonista fucker, unos amigos que son aún más fuckers que el anterior y que facilitan que el protagonista pueda aparecer a veces como si fuera decente,… Luego añadimos los elementos clásicos del ecchi, que a saber son chicas con unas tetas que desafían el conocimiento humano y una ropa especialmente sensible a cualquier tipo de interacción externa. Y para completar la ecuación metemos un trasfondo que, como digo siempre, sin necesidad de sentar las bases de una obra maestra, resulte interesante. La existencia de tres bandos enfrentados, los demonios, los ángeles caídos y los ángeles; una guerra anterior que debilitó a los demonios, la existencia de clanes de demonios purasangre con sus relaciones entre ellos, el hecho de que cada demonio de alto nivel se corresponda con el rey del ajedrez y que pueda disponer de tantos súbditos como piezas de ajedrez con sus respectivos poderes, la existencia de artefactos sagrados…

Unlimited Blade Works... ground edition.
Y una vez dado ese marco, sólo queda poner unos personajes que hagan que todo se mueva y que consigan que el que lo vea empalice con ellos. Además de los puros protagonistas, veremos aportaciones entretenidas con los demás sirvientes de Rias, con la bipolar Akeno, que es muy tranquila hasta que entra en combate y se vuelve una sádica, la seria Koneko, que le reprocha a Issei todos sus comportamientos de pervertido, el formal Kiba o la antigua monja exorcista Asia. Yo debo confesar que soy muy dado a encariñarme con los protagonistas de subtipo fucker despreciable (no sé muy bien por qué… ejem…), así que Issei me cae bien. También me gusta el resto de personajes, sobre todo del bando protagonista, aunque hay algunos por los que se pasa de puntillas, como por ejemplo Kiba, del que apenas podremos conocer su odio hacia la iglesia y poco más. Si tuviera que remarcar algo de la serie, en mi caso sería sin duda cuando empiezan a establecer las similitudes con el ajedrez. A partir de ese momento tuve un mayor interés en conocer cómo se las iban a apañar para reflejar sus distintas habilidades y cómo influiría en todo esto los diferentes tipos de artefactos sagrados que fueran apareciendo.


Conclusión

En definitiva, tengo que decir que es una serie que me ha gustado mucho y que sin duda recomendaría a alguien que buscase alguna serie de este género. Por un lado hay un trasfondo que, si bien no podemos decir que sienta las bases de un mundo de posibilidades, si que puede ser equiparable al de un shounen tipo. Esto hace que pueda desarrollarse una historia seria e interesante, mientras que por las propias características de la serie haya momentos de relax, de comedia o de simple y llano fanservice. No he notado ningún pico especial en la serie, aunque también diría que sigue una línea ascendente, ya que el final es bastante interesante, incluidos esos momentos de suspense cuando dices “Bueno, ¿y ahora qué?”

¡Chúpate esa, Chun Li de pacotilla!
Además, es de destacar que la serie tiene muchos momentos cómicos mediante parodias y alusiones a otras series. Desde transformaciones que me recuerdan un poco a las que veíamos en Sailor Moon hasta la frase utilizada por el protagonista de “Yo seré el próximo rey del harén” (parodia de “Yo seré el próximo rey de los piratas” de Luffy en One Piece), todo esto pasando por la aparición de una especie de Ash Ketchum que por fin parece haber dejado atrás sus eternos 10 años entre otras alusiones. Y como punto final, sin miedo a ser repetitivo, remarcaré que no es una obra maestra pero sin duda se deja ver y de la que espero con interés la segunda temporada (aunque intentaré encontrar una versión en BD, que la censura debe castrar este anime hasta límites insospechados)

Lo mejor.- El personaje de Rias Gremory, que al principio da la sensación de ser un demonio al uso y luego sorprende. La inclusión de los artefactos sagrados en la ecuación de la serie, que molan (sobre todo el de Kiba, que me recuerda a Archer en Fate/Stay Night). Catorce novelas deben dar bastante de sí como para tener anime para rato. Las frases míticas de la OVA. El despertador tsundere, ¡quiero veinte!

Lo peor.- Nos movemos mucho tiempo con un trasfondo que puede dar de si, pero que no lo hace. Sólo hay un pequeño momento de “trama seria” y es el final de la serie, aunque es sólo una primera temporada de 12 episodios y habrá que ver la evolución.


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